viernes, 28 de abril de 2017

Vuelta a Colina, la magia del Asón.

Habíamos oído hablar hace tiempo de la Ruta Vuelta a Colina en el Parque Natural de los Collados del Asón, Cantabria. Y por fin nos hemos atrevido con ella. 
Se trata de un recorrido circular de 17 kms, que aunque penséis que es algo larga porque se tardan más de seis horas, se hace corta gracias a los variados ecosistemas que se recorren a lo largo de la ruta.


El día acompañó, y comenzamos la subida de la ruta sin prisa pero sin pausa por el bosque de hayas del Monte Asón hasta alcanzar la plataforma de abrasión glaciar tan singular con vistas espectaculares a la costa este de Cantabria donde siempre predomina de modo tan característico el Monte Buciero de Santoña. Esta plataforma recibe el nombre de complejo glaciar de Saco, y su origen de debe a la erosión por el hielo durante el cuaternario. 


 

Reconocemos que las fotografías no le hacen justicia al enclave que es sobrecogedor e inmenso, y que merece la pena descubrir. Alcanzado este punto, seguimos hasta la cumbre de Colina aproximadamente a unos 1440 m.s.n.m., tras rodear algunos antiguos glaciares y disfrutar de los neveros que aún quedan por el camino.



Alcanzada la cima, nos queda el descenso, y cuando pensábamos que ya habíamos disfrutado de lo mejor de la ruta aún nos quedaba mucho por descubrir. ¡La bajada es asombrosa! En esta zona nos perdimos un poco porque faltan algunas balizas, toda la ruta está bien señalizada y numerada, pero una vez que alcanzas la cumbre hay que estar atento. El despiste nos vino bien, pues aprovechamos para descansar, comer e hidratarnos antes de bajar.

Tomando una bajada alternativa retomamos la ruta hasta alcanzar la antigua morrena glaciar que ya nos encaminó hasta el paso del Portillo de Las Escalerucas, localización digna para el rodaje de una película tal como la de el Señor de los Anillos


Seguimos bajando y descubriendo la Vuelta a Colina dejando el ecosistema de alta montaña, y atravesando lapiáces y formas karsticas generadas por la erosión que realizan principalmente el agua y el viento sobre la roca caliza. Para aquellos que tengáis un poco de vértigo, no os recomendamos que os asoméis por la fisuras generadas en la roca, pues da sensación de vacío.


Continuamos con el descenso y alcanzamos el Cañón de la Cañada de Moncrespo también llamado Hazas del Respiradero, ¡pero menuda sorpresa de lugar! Después de haber pasado bastante calor a lo largo de la jornada y sobre todo durante la subida, encontrarse en este espacio de cuentos relaja y refresca. 



Atravesamos el hayedo del Monte Moncrespo siempre junto a formas karsticas que hacen único el paisaje, y descendemos finalizando este recorrido circular viendo el canal y ponor de Benavinto, ¿qué es un ponor os preguntaréis como nosotros? es una abertura por la que una corriente superficial o lago, fluyen total o parcialmente hacia un sistema kárstico de agua subterránea. 

Esta ruta de Vuelta a Colina de dificultad media ha sido un gran descubrimiento para Caria Turismo y Arqueología, a todos aquellos que os apasione la naturaleza, el senderismo, no debéis dejar de realizar este gran recorrido que os sorprenderá a cada paso. El descaso merecido lo realizamos al final del recorrido refrescando los pies con agua de deshielo (congelada obviamente) y disfrutando del Valle del Asón, un gran desconocido en Cantabria.